Sismo de 6,1 solo sería una advertencia: IGP alerta de posible terremoto de 8,0 que afectaría a Lima e Ica
Hernando Tavera, presidente del IGP, explicó que dependiendo de la magnitud del sismo, se liberaría muchísima más energía equivalente a bombas atómicas como la usada en Hiroshima.
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El sismo de magnitud 6,1 que remeció Lima y Callao el pasado domingo 15 de junio podría ser solo un anticipo frente a un posible terremoto de magnitud 8,0, según las advertencias del Instituto Geofísico del Perú (IGP). Cabe destacar que la capital se ubica en una zona altamente sísmica: el Cinturón de Fuego del Pacífico, donde convergen las placas tectónicas de Nazca y Sudamericana.
Por ello, el presidente del IGP, Hernando Tavera, explicó que para liberar toda la energía acumulada en este punto tendría que suceder un sismo de gran magnitud. "Imagínate, por un lado, que regresas de la playa, sacudes las zapatillas y caen algunos granitos de arena en el piso y, por otro lado, que venga un volquete lleno de arena y descargue en la puerta de la casa. Esa es la diferencia entre un sismo de magnitud baja con uno de magnitud alta que sí libera energía”, sostuvo para andina.
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La advertencia del IGP sobre un terremoto de 8,0
El director del Instituto Geofísico del Perú (IGP), Hernando Tavera, emitió una advertencia sobre la posibilidad de un terremoto de al menos 8 grados en la costa central del país, lo que podría tener un impacto significativo en regiones como Lima e Ica. Esta declaración se produce en un contexto de actividad sísmica constante, con al menos 300 temblores registrados en lo que va del año.

IGP advierte los riesgos sobre un sismo de gran magnitud en Lima. Foto: Composición LR
Tavera enfatizó que, aunque no es posible controlar los fenómenos naturales, es factible disminuir el riesgo a través de una adecuada preparación y medidas preventivas. La autoridad hizo hincapié en la necesidad de mantenerse informados y alertas ante cualquier eventualidad. “No podemos controlar a la naturaleza, pero sí reducir el riesgo”, aseguró.
Ante la posibilidad de un sismo de 8,0 en la costa, las zonas más afectadas serían los departamentos de Lima e Ica, dado su cercanía a la costa central del país. Ante esta situación, se hace un llamado a la población para que mantenga la calma y se prepare adecuadamente.
En los últimos meses, se han registrado sismos de magnitudes superiores a 5 grados, considerados los más significativos. Sin embargo, el IGP aclara que el impacto de un sismo no se mide únicamente por su magnitud, sino también por el nivel de sacudimiento del suelo. Este último factor está influenciado por la profundidad del epicentro y su cercanía a áreas urbanas con alta densidad poblacional, como es el caso de Lima.
¿Qué tan fuerte sería la energía liberada de un terremoto de 8,0?
Popularmente se cree que los pequeños temblores pueden liberar energía y prevenir la ocurrencia de un gran terremoto. Sin embargo, esta afirmación carece de fundamento, según Tavera. Los movimientos telúricos de baja magnitud, como los de 3, 4 o 5 grados, no contribuyen a mitigar el riesgo de un sismo mayor.
Para ilustrar la magnitud de la energía liberada en los sismos, Tavera explicó que cada incremento de un grado en la escala de magnitud representa un aumento de 30 veces en la energía liberada. Por ejemplo, un sismo de magnitud 5 libera energía equivalente a una bomba atómica, similar a la que se utilizó en Hiroshima. En comparación, un sismo de magnitud 6 liberaría la energía de 30 bombas atómicas, mientras que uno de magnitud 7 equivaldría a 900. Un terremoto de magnitud 8 se asemejaría a 27,000 bombas atómicas, y un evento de magnitud 9 liberaría la energía de 810,000 bombas atómicas.
“El terremoto de Japón del 2011, de magnitud 9.0, produjo una longitud de ruptura de 450 kilómetros (km); el sismo de Pisco de 2007, de 200 km aproximadamente; el sismo de 2001 en Arequipa, de 300 km; el sismo de Mala del 22 de junio solamente ha producido una ruptura del orden de 7 km. Entonces, los pequeños sismos solamente producen rupturas de milímetros o centímetros, en comparación con los grandes sismos que sí producen grandes longitudes de ruptura”, agregó.
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